lunes, 15 de agosto de 2011

"Naufragios" de Danny E. Barrenechea León



Danny E. Barrenechea León traza con su ópera prima un recorrido por las viejas calles del Centro de Lima, el escenario de las vicisitudes de un poeta náufrago, quien se divide para poetizar la modernidad de una ciudad caótica y excluyente. Su lenguaje narrativo y coloquial va describiendo el periplo de un náufrago. Ésta su nave, que es la poesía, nos va llevando de una ribera a otra, reflexionando la soledad desde la marginalidad como los poetas de los años 70s, pero sin el vitalismo ni el parricidio de entonces. El trote pausado y equilibrado de sus versos lo empapa con el argot de la calle, la visión de un provinciano que no le da tregua a los sucesos amorosos y vivenciales. Así nos lo hace saber su alter ego cuando nos cuenta la precariedad en que vive y nos va sumergiendo en la rutina de un hombre melancólico, en donde el amor, el desamor y el fracaso van de la mano sin dejarnos respirar un solo instante, dando homenaje a Julio Ramón Ribeyro y a su diario personal “La tentación del fracaso”: “¿Por qué estaré tan decepcionado? Sin dinero, sin éxito, sin amores, mis días van cayendo como las hojas secas de un árbol”.
Así es el poeta, sale de un puerto, sale del útero de la madre pero conforme avanza se le va cayendo todo, vestiduras y etiquetas, hasta quedarse desnudo en el absurdo. Zarpa de alguna parte pero nunca llega. Lo que sí llega a buen puerto es esta buena poesía. Y eso es suficiente para no fracasar en el intento. (Domingo de Ramos)